Exportación española a la Unión Europea: Últimas barreras
Desde sus comienzos en 1993, el Mercado Único Europeo eliminó las fronteras de los países de la Unión Europea, permitiendo que los bienes circulasen con la misma libertad que en el interior de un país.
Más allá de las ventajas que ha presentado, el Mercado Único todavía presenta algunas barreras a la libre circulación, tal como analizamos en el siguiente artículo.
Línea abierta
Desde la creación del Mercado Único, la Secretaría de Estado de Comercio, ICEX España Exportación e Inversiones, y la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) llevan realizando un trabajo de seguimiento para detectar los problemas que puede encontrar la empresa española en sus expediciones a la UE. Es la denominada “Línea Abierta”.
Según el informe presentado este año 2017 por estos organismos, titulado línea abierta para la identificación de problemas de las empresas españolas en el mercado único europeo FASE XIV, el 17% de las empresas españolas que venden sus productos en la Unión Europea encuentran algún tipo de traba.
Este informe es el resultado de la información obtenida a partir de las entrevistas mantenidas con 500 empresas españolas que prestan sus servicios en algún Estado miembro de la Unión Europea.
Tipos de barrera
Como resultado de esta encuesta, se ha detectado que 34 empresas (un 6,8%) han encontrado alguna traba en el desarrollo de su actividad dentro del Mercado Único, recopilando un total de 123 trabas, que se clasifican dentro del informe final en: 16 obstáculos comerciales, 61 problemas y 46 dificultades.
Para entender mejor este punto, cabe señalar que se consideran obstáculos comerciales aquellos requisitos de cumplimiento obligatorio que vulneran las normas del Mercado Único o suponen una barrera notable.
El resto de trabas identificadas corresponden mayoritariamente a barreras impuestas entre las empresas, que se han clasificado en problemas cuando se consideran de cierta importancia, y dificultades cuando se tratan de problemas de menor entidad.
Según la información proporcionada por las empresas españolas, la mayoría han encontrado obstáculos para sus exportaciones de servicios en una proporción similar a la importancia de los mercados europeos.
Obstáculos Comerciales:
- Operaciones comerciales y contratos (6,25%)
- Libertad de establecimiento (25%)
- Mercados públicos (6,25%)
- Libre prestación de servicios (62,5%)
Problemas:
- Reglamentación técnica (21,3%)
- Trabas administrativas y fiscales (4,9%)
- Contratación de transporte (4,9%)
- Operaciones comerciales y contratos (18%)
- Libertad de establecimiento (8,2%)
- Mercados públicos (4,9%)
- Libertad de circulación de trabajadores (4,9%)
- Libre prestación de servicios (32,8%)
Dificultades (37,4%):
- Reglamentación técnica
- Trabas administrativas y fiscales
- Mercados públicos
Territorios
En concreto, los obstáculos se han detectado en los siguientes Estados miembro en la siguiente proporción:
- Alemania 25%)
- Francia (25%)
- Reino Unido (12,5%)
- Italia (12,5%)
- Finlandia (6,3%)
- Irlanda (6,3%)
- Grecia (6,3%)
- Rumania (3%)
Observando los resultados por comunidades autónomas, las empresas que más obstáculos han señalado son las de Comunidad Valenciana (21,1%), Castilla y León (14,1%), Cataluña (11,3%) y Aragón (11,3%).
Si buscamos datos de la exportación española hacia la Unión Europea, se observa que pese a las trabas encontradas, mantienen cifras de crecimiento:
Exportaciones de España a la UE (27). Miles de €
Valor exportado en 2012 |
Valor exportado en 2013 |
Valor exportado en 2014 |
Valor exportado en 2015 |
Valor exportado en 2016 |
174.645.411 |
190.397.719 |
198.056.697 |
177.218.187 |
184.080.501 |
Fuente: Trademap.org
Según estos datos, el crecimiento fue positivo en 2016 respecto a 2015 – un 3,73% – si bien ha reflejado una tasa media interanual de crecimiento de las exportaciones de España a la Unión Europea en el período 2012-2016 de apenas un 0,82%.
En cualquier caso, los datos son positivos, aunque hay que seguir trabajando para minimizar las trabas de la exportación española a la UE. El proyecto Línea Abierta de ICEX y CEOE tiene el fin de buscar soluciones en colaboración con las autoridades competentes de las administraciones nacionales o comunitaria.
Hay que tener en cuenta que el mercado común recibe el 66,3% de las exportaciones españolas y que este mercado está compuesto por 500 millones de consumidores y por más de 20 millones de empresas.
Por lo tanto, es fundamental que la empresa exportadora española pueda realizar su actividad en el Mercado Único con garantías de que se cumple el principio de la libre circulación de mercancías y de la aplicación de la Directiva relativa a los servicios en el mercado interior.
Las expediciones españolas a la Unión Europea se concentran en cinco mercados: Francia, Alemania, Italia, Reino Unido y Portugal. Es lógico, por tanto, que los obstáculos comerciales, problemas y dificultades relacionados con el funcionamiento del Mercado Único se localicen mayoritariamente en estos países.
Teniendo en cuenta únicamente los obstáculos comerciales, encontramos que son los siguientes cinco Estados los que ocupan los primeros puestos.
- Francia: 45,1%
- Alemania: 18,3%
- Reino Unido: 7%
- Italia: 5,6%
- Suecia: 4,2%
Estos 5 países acumulan el 80,3% de todos los obstaculos comerciales que encuentra la empresa exportadora española en el mercado de la Unión Europea.
Sectores
Los sectores con mayor número de obstáculos son: Semi-manufacturas (36,6%), Alimentación (19,7%), Bienes de equipo (18,3%), Manufacturas de consumo (16,9%) y Bienes de consumo duradero (7%). En total suman el 98,5% de todos los obstáculos encontrados.
Tras casi veinticinco años de existencia, podemos concluir que el Mercado Único funciona de acuerdo a los parámetros para los que se creó, pero, a pesar de todos los beneficios que representa y de lo mucho que se ha avanzado en su integración y funcionamiento, aún se encuentran algunos obstáculos que restringen la libre circulación de bienes y de servicios.
Problemas sector servicios
El informe refleja que el sector de los servicios no está tan integrado como el mercado de bienes, a pesar de que, en diciembre de 2006, la Comisión Europea publicó una Directiva – 2006/123/CE. relativa al sector servicios en el Mercado Interior.
El objeto de esta directiva es el de suprimir los problemas y obstáculos que todavía restringen el acceso a las actividades de servicios y su ejercicio, simplificando trámites y procedimientos e impulsando una ventanilla única en cada Estado miembro.
De igual manera, esta Directiva supone la mejora y la supervisión de los prestadores mediante la cooperación entre Administraciones, reforzando la protección y derechos de los consumidores y el establecimiento definitivo de un Mercado Único de Servicios.
El correcto funcionamiento del Mercado Único contribuye de forma evidente al progreso económico y social de una Europa unida, y más en el momento actual, caracterizado por corrientes mundiales con una gran incertidumbre y tendencia de grandes potencias, como EE.UU., al proteccionismo.
Una consolidación definitiva de la Directiva 2006/123/CE evitará la fragmentación del mercado comunitario, hecho que repercute de manera negativa en la competitividad de las pymes, que suponen la mayoría del tejido empresarial español.
0 commentarios